martes, 30 de agosto de 2016
Aquí te damos unas cuantas razones:
1. Porque te cuesta mucho salir delante de un público y hacer tu presentación o dar un discurso.
2. Porque al hablar en público te sudan las manos, notas que te pones colorado y el corazón te va a mil por hora.
3. Porque cuando estás delante de un auditorio no sabes a dónde mirar.
4. Porque te gustaría salir corriendo cada vez que tienes que hablar en público.
5. Porque no sabes qué hacer con las manos.
6. Porque no sabes cómo utilizar la voz para sacarle el máximo partido al hablar en público.
7. Porque no tienes clara la postura que debes mantener al hablar en público.
8. Porque no conectas con tu auditorio, notas que se aburren cuando hablas.
9. Porque al hablar en público tu cuerpo dice una cosa y tu mensaje y tu voz otras. No eres congruente con tus tres tipos de lenguaje.
10. Porque todos, en algún momento de nuestra vida personal o profesional, necesitamos hablar en público.
Por eso, la Escuela Europea de Oratoria ha creado el curso "Especialista en Oratoria". ¡Ya vamos por la 11ª y 12ª edición!
Aquí tienes toda la información. Decídete ya. Mientras tú lo piensas, otros se apuntan...
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