Cuando el orador pierde los papeles...

Sucedió ayer en un evento en el que participaba como orador el presidente de la Asociación de la Prensa de Granada, Antonio Mora. Ante la interrupción de un acto de inauguración de una exposición fotográfica denominada "25 años de relaciones diplomáticas España-Israel", un grupo de integrantes de la "Plataforma Andalucía con Palestina" interrumpió el acto. 

En ese momento, según puede verse en el vídeo, Antonio Mora se levantó de la mesa presidencial, se quitó el cinturón y con él en la mano en forma amenazante se acercó hacia una de las activistas que extendía una bandera. Afortunadamente el presidente de la Asociación de la Prensa de Granada no siguió con su agresión y se sentó en el patio de butacas. 

Me gusta insistir en la importancia de la inteligencia emocional en cualquier circunstancia de nuestra vida y en la Oratoria aún más. ¡Estamos expuestos ante un público y debemos gestionar adecuadamente nuestras emociones! Comento en clase que es normal que empleemos nuestras emociones, entre ellas el enfado; otra cosa es emplear en público la ira, la carga emocional del enfado. El ejemplo del presidente de la Asociación de la Prensa de Granada es vergonzoso y, aunque él ya se ha disculpado, su mala gestión de emociones quedará... para siempre.

De ahí que en los cursos que doy sobre Oratoria, tanto los intensivos como "Seduce hablando en público" se hace mucho hincapié en la importancia de la inteligencia emocional para formar al orador.